El 4 de julio el Senado aprobó la ley corta de telecomunicaciones enviada por Mauricio Macri con apoyo del bloque Justicialista, pero en Diputados parece no tener el camino allanado: antes que empiece el tratamiento en comisiones fue impugnada por el pampeano Sergio Ziliotto.

La norma habilita a Telefónica y América Móvil (Claro) a brindar desde julio de 2020 televisión satelital y ofrecer así cuádruple play sin invertir en fibra óptica. Y regula la cesión de infraestructura pasiva a las empresas de tecnología de información y comunicación (TIC).

En una nota enviada a Emilio Monzó, Ziliotto, cercano al gobernador Carlos Verna y parte del bloque Argentina Federal, advirtió que el proyecto habilita la venta de frecuencias radioeléctricas que tiene Arsat pero no fue aprobada con dos tercios del Senado, como obligaba el artículo 11 de la ley 27.208, sancionada un mes antes de finalizado el mandato de Cristina Kirchner.

El diputado Ziliotto, de La Pampa, impugnó la ley corta de telecomunicaciones porque no fue aprobada con dos tercios. Cambiemos necesita consolidar aliados para sancionarla. 

Fue uno de los tantos "cazabobos" jurídicos creados por la ex presidenta en su último mes de gestión y tal vez por distracción fue ignorado por los senadores de Cambiemos. El proyecto, como está redactado, elimina el artículo de aquella ley que prohíbe comercializar las frecuencias de Arsat pero no el que obliga a dar ese paso con dos tercios de cada Cámara.

Y aunque los interbloques de Miguel Pichetto (Argentina Federal) y Luis Naidenoff (Cambiemos) reúnen ese número por sí solos, al momento de votar no aparecieron varios de sus senadores como los peronistas Dalmacio Mera, Carlos Caserio y José Mayans y los oficialistas Laura Rodríguez Machado y Ernesto Martínez, ambos de Córdoba.

Sí estuvieron los pampeanos Daniel Lovera y Norma Durango y aprobaron la ley tras imponer protecciones a las cooperativas de su provincia, que no estarán obligadas a ceder su infraestructura como marcaba la versión original. Verna parece arrepentido.

La única restricción que tendría el Enacom para vender las frecuencias es ceder un 20% en "condiciones de competencia y promover el desarrollo regional" incorporando prestadores locales.

"Se sigue excluyendo a Sociedades del Estado (SAPEM) y Cooperativas como Operadores de Red del Servicio de Telecomunicaciones, condición indispensable para que sean pasibles de una asignación del espectro radioeléctrico", se quejó Ziliotto que integra la Comisión de Comunicaciones de Diputados que el martes fijará una agenda para debatir el proyecto.

Su presidente, el cordobés Juan Brügge, también de Argentina Federal, citará a la titular de la Enacom, Silvana Giúdice, que no quiso ir a hablar al Senado. Si la rebelión pampeana la ley podría trabarse porque Cambiemos necesita de al menos un bloque opositor para alcanzar mayoría y de alguno más si pretende dos tercios.

En el Senado la ley se debatió varios meses en Comisión y cuando se alcanzó un acuerdo, la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) autorizó la fusión entre Cablevisión y Telecom, el otro jugador grande del mercado y el único capaz de brindar cuádruple play con redes de fibra óptica. Y poco después Telefónica impugnó la fusión y amenazó con ir a los tribunales internacionales. No esperó la sanción de su ley.